Recordemos aquí que hay tres clases de enzimas:
- Los enzimas metabólicos - que mantienen el cuerpo.
- Los enzimas digestivos - que digieren los alimentos.
- Los enzimas nutritivos - presentes en los alimentos crudos y que inician el proceso de digestión.
El profesor japonés Ykie Niwa confirma los descubrimientos del Dr. Howell: muestra que en la mayor parte de las enfermedades importantes y problemas infecciosos, en los que el sistema inmunológico se encuentra desbordado, el organismo presenta una carencia de superoxidasa dismutasa (S.O.D), que es el enzima metabólico encargado de la destrucción de los radicales libres (muy relacionados con los procesos de envejecimiento).
Los enzimas son escasos en las frutas frescas y verduras, pero importantes en las leguminosas, cereales integrales y frutos secos. Hay que recordar que el calor destruye los enzimas nutritivos a partir de los 47º. Si remojamos los cereales y las legumbres toda la noche antes de ser cocinados permitirá a los enzimas realizar su trabajo, y no perderemos sus beneficiosos efectos con la cocción.
Los enzimas nutritivos están también presentes en cantidades considerables en las semillas germinadas, los frutos secos, productos lactofermentados (encurtidos, pickles, salsa de soja shoyu, salsa de soja tamari, miso...), productos de la colmena y pan integral con levadura natural.
(Información obtenida del libro: "Nutrirse y vivir" - Martine Catani)
1 comentario:
Hola,
¿Es necesario poner en agua el avena? Suelo desayunar avena y nunca la pongo en remojo. Gracias
Publicar un comentario