sábado, 4 de octubre de 2008

Mati Navas, consultora de macrobiótica

Hola a todos,

mi nombre es Matilde Navas Fernández y soy la consultora de macrobiótica que se encuentra a vuestra disposición en La Crisálida.

Me gustaría presentarme y aprovecho este pequeño espacio para hacerlo. La forma en que llegué a este camino creo que explica bastante bien los motivos que me mueven para desarrollar este trabajo, que es un trabajo que realizo con dedicación y amor. Por eso voy a contárosla brévemente:

Hace algún tiempo afloraron de lleno, en mi, todos los sentimientos que pueden surgir tras el diagnóstico de una enfermedad seria en una hija mía: dolor, desasosiego, rabia, incomprensión... pero también sentí la esperanza de encontrar un camino menos racional y menos científico según nuestra ciencia que quizás pudiera ayudarla a mejorar. En esa desesperada búsqueda encontré la Macrobiótica.


Descubrí que algunas cosas que pueden afectar nuestra salud son difíciles de cambiar, como es un aire contaminado o una predisposición genética pero hay otro factor sobre el que ejercemos un total control: Lo que comemos.

Experimenté junto con mi hija que es posible ayudar a nuestro cuerpo a sacar su máximo potencial de recuperación y encontrar de nuevo su equilibrio, ayudado por una adecuada alimentación que armonice las energías de nuestros órganos y considere su funcionamiento como un todo.

Si observamos el origen de las grandes transformaciones de esta era moderna con los alimentos refinados y procesados industrialmente, los aditivos químicos, los pesticidas , los microondas... nos daremos cuenta del abismo que hemos cavado respecto a las características de una alimentación natural, que ha nutrido al hombre por miles de años. La Macrobiótica respeta el orden natural y conecta al cuerpo con su verdadera esencia, que es la salud.

He trabajado casi treinta años como profesora en la enseñanza pública y sentí que tenía que seguir enseñando lo que había experimentado y aprendido con el gran cambio en la salud y bienestar de mi hija, pues para mi es un tesoro que ha cambiado mi vida.

He realizado mi formación macrobiótica en el Instituto Macrobiótico de Portugal(Lisboa), donde he formado parte además del equipo de trabajo por un año, y en Escuela de Vida(Madrid), junto a profesores de reconocido prestigio.


Continúo en este camino de búsqueda para ayudar a mostrar una vía de esperanza.


Un saludo a todos.

Mati Navas.


3 comentarios:

Maribel dijo...

No sabeis la alegria que me ha dado encontrar vuestro blog, y sobre todo verte Raquel, en esa foto lo guapa que estás, de corazón os digo que sois un ejemplo a seguir, tu y tu madre.
Un abrazo muy fuerte a las dos.

Os agrego a un nuevo blog que me estoy creando.

Optica Santa Lucia dijo...

Hola,
Soy una novata en la filosofía macrobiótica, vivo en A Coruña, con lo cual, me es imposible asistir a tus cursos. Tengo unas dudas, que si no es inconveniente por tu parte me gustaría que me aclarases.

Desde que comencé a comer la comida macrobiótica adelgacé 4 kilos, de lo cual estoy contentísima. Preparo las legumbres con el alga Combu (un trozo de 5 cm). ¿Será perjudicial para mí?.
Un saludo

ANA KIN

Raquel dijo...

Hola Ana,

Me alegro de que te unas a la aventura macrobiótica. Las legumbres las cocinamos siempre con un pedacito de alga kombu que por su alto contenido en ácido algínico reduce el tiempo de cocción de estas y las hace más digestivas (menos gases). Además el consumo regular y en pequeña cantidad de algas aporta a nuestro organismo minerales de muy buena calidad y también vitaminas. En principio todas las personas pueden beneficiarse de su consumo exceptuando bebés y personas con desajustes del tiroides que deben limitar su consumo o evitarlas por un tiempo según el caso. Un saludo y buen viaje.